Y cuando parecía ser otro año más o menos similares a los anteriores, el mundo se puso patas arriba. Será que esto es un efecto colateral de las agresiones que produce la Humanidad a la Madre tierra? o un simple mecanismo de adaptación de la vida microbiana re acomodándose a nuestras condiciones de vida, nuevos estimulos quimico-contaminantes que refuerzan su capacidaad de superviviencia y le convierten en un super microbio, con gran capacidad de instalarse en nuevos anfitriones? o será solo el infeliz en cuentro de un nuevo microorganismo, vía el exótico omnivorismo humano, con un nuevo y fertil huesped, luego de decadas del humano de intoxicacion y dieta antinatural? Algunos sospechan de la mala intención humana y atribuyen un origen premeditado, señalando intervención del hombre y un laboratorio de por medio, una especie de anticipo de una guerra bacteriológica que se les fue de lasmanos?
Y enotnces llego la cuarentena, las restricciones de viaje, los tapabocas y los equipos de bioseguridad. Sin embargo la enfermedad convertida en repentina moda continúo, da la impresión que en cuarentena y con todos encerrados en los ambientes cerrados de casa y con la anonima precensia de los asintomáticos, el festín del contagio se intensifico y continuaron danzando las cifras de muertos y heridos. Son simples preguntas, aveces sospechas que presienten entre lineas de la circunstacnicas, camuflados intereses y calculada informacion. Qué hay detras de lo que se dice? cómo saber lo que cuidadosamente se evita mencionar? Ahora nos hablan de una segunda ola y luego habra una tercera? Y una cuarta incluira una generalizada epidemia de miedo, terreno fértil para sembrar medidas y disposiciones que en otro contexto serian inaceptables?
Más allá de estas interrogantes y mientras mi libertad me mira pensativa observo como mi optimismo se pone de pie y mirando en las cuatro direcciones constata que la vida continua siendo magica, que los atomos continúan danzando y las semillas germinando. Alguien me dijo hace poco que en su ciudad murió el silencio y que nadie fue al sepelio pero que luego llego la música y la fiesta de la vida continúo celebrando el naciiento de nuevos instantes que podrian germinar en oportunidades, usando el abono de la creatividad.
Entonces me tranquilizo, me continúa sucediendo la vida, mi consciencia me dice, sigamos fabricando buenos recuerdos y tejiendo nuevas solidaridades, vigilando de cerca a nuestra libertad para que sus multiples colores, continuen pintando nuestros dias. Constato tambien que mi raiz permanece intacta y que la zona sagrada de mi vida no fue profanada, que podemos continuar celebrando amaneceres y que todas las terribles novedades, podrian ser recursos para fortalecernos mientras duplicamos el alerta sereno y las ganas de vivir la vida , como fiesta sagrada.